Cuentan los sabios de Timbavati la historia de una real familia de leones que repoblaron la sabana, la tierra que les pertenecía. Allí nacieron dos hermanos, Soeveli, el heredero legítimo del trono de la Sabana, y KIMBA, EL LEÓN BLANCO que no querían reinar. Ambos, hijos del Rey León Ismat y la Reina Mara, crecieron bajo la protección del amor incondicional de su padre.

Uongo, el guepardo, fue elegido consejero real y aunque todos creían conocerlo, nadie sabía el profundo rencor que el guepardo sentía por los leones. Buscó un aliado para ejecutar su venganza y ocupar el trono cuando los leones hubieran sido vencidos.

El Rey Ismart se fue de repente al cielo de los leones, pero el ciclo de la vida ha de continuar. Hoy en Timbavati es el día en el que Soeveli será coronado el nuevo Rey de la sabana. Y aquí comienza esta historia, una historia que habla de un león blanco y un rey que no había nacido para serlo?